Fiestas infantiles: claves para prepararlas si hay niños con alergias

Fiesta de cumpleaños: niños con alergías

Fiesta de cumpleaños: niños con alergías

Los padres de un niño con alergias o intolerancias aprenden a una velocidad vertiginosa a evitar aquel o aquello alimentos que puedan provocar una reacción adversa a su hijo o hija. Sin embargo, ¿qué sucede cuando lo invitan a un cumpleaños?

En la mayoría de las fiestas infantiles no se tiene en cuenta si algún niño tiene una intolerancia, lo que puede hacer que, en algunos casos, el peque se sienta desplazado o, peor aún, nos llevemos algún susto si el niño ingiere un alimento al que es alérgico.

La reacción adversa a los alimentos es una de las alergias más comunes. En estos casos, es muy importante que los papás del niño o niña avisen a los organizadores de la fiesta y, si sois vosotros los encargados de la organización, esto es lo que debemos tener en cuenta:

Diferencia entre intolerancia y alergia

En primer lugar, debemos tener en cuenta que una alergia y una intolerancia no son lo mismo y, sus síntomas, también son diferentes. En el caso de las alergias, el niño sufrirá una reacción adversa inmunológica cuando consuma el alimento, en el caso de la intolerancia, la respuesta no está mediada por el sistema inmunológico, por ejemplo, por alguna enzima que no sea capaz de metabolizar el alimento.

Aunque ambas hay que evitarlas, las intolerancias generar nauseas, gases, retortijones, diarreas y/o dolores de cabeza. Las alergias suponen un riesgo vital, ya que genera problemas respiratorios, opresión en la garganta o inflamación, lo que puede suponen un cierre de las vías respiratorias.

Alergias e intolerancias más comunes y cómo evitarlas

Leche

La leche es uno de los alimentos que más intolerancia genera, y los síntomas más comunes son gases, vómitos y diarreas. Evita, por supuesto, la leche, pero también todos sus derivados, como el queso. Ten en cuenta también que muchas tartas se realizan con leche.

Puedes sustituirla por leche sin lactosa o leche de origen vegetal, como leche de avena, de almendras, de soja…

Gluten

La intolerancia al gluten (cereales que contienen gluten como el trigo, el centeno, la cebada y la avena) provoca dolor abdominal, diarrea crónica, irritabilidad, apatía, déficit de crecimiento y distensión abdominal. No sólo debemos evitar los alimentos que tengan gluten, sino que es importante que no haya interferencias, por ejemplo, al utilizar el mismo cuchillo.

Es importante que busques productos que especifiquen claramente que son sin gluten y, en el caso de panes, masas o postres, utilices los específicos para celiacos.

Frutas y verduras

Algunos niños pueden tener alergia a algunas frutas y verduras. Entre las más comunes están las frutas rosáceas (70% de todas las alergias a frutas), sobre todo el melocotón. En cuanto a hortalizas, las alergias más comunes son al tomate, la lechuga y la zanahoria. También los frutos secos son una fuente muy común de alergias, sobre todo el cacahuete, la avellana, la almendra y la nuez.

En este caso, lo mejor es evitar el alimento en concreto que genere la alergia. En cuanto a los frutos secos, ten en cuenta que muchos productos pueden contener trazas de frutos secos, por lo que debes revisar el envase antes de servirlos.